Gestionando el ciclo de vida de producto en eCommerce
Lanzar un nuevo producto en tu tienda puede llegar a ser un momento muy ilusionante. En este post quiero ayudarte a entender un poco mejor cómo gestionar el ciclo de vida de un producto en eCommerce de modo que puedas sacar el mayor rendimiento de él en cada una de las fases.
Fases del ciclo de vida del producto
Este es el primer concepto que debemos tener absolutamente claro: los productos atraviesan distintas etapas dentro de su vida comercial. Esto es así absolutamente con todo lo que os podáis imaginar y afecta a absolutamente cualquier cosa que se venda (online u off line), la única diferencia estriba en el tiempo que cada uno pasa en cada una de estas fases, pero siempre existen cuatro diferenciadas.
Fase de introducción
Es ese momento en que el producto es lanzado al mercado. Hasta este instante, detrás puede haber estudios de mercado, cualitativos, de la competencia… o simples corazonadas y oportunidades que surgen de vez en cuando.
Durante la fase de introducción es necesario hacer una mayor tracción en comunicación, promoción y publicidad, al fin y al cabo los clientes potenciales no sabían nada de la existencia de nuestros productos hasta este momento.
Ahora lo que toca es hacer ofertas de lanzamiento (incluso jugando con nuestro margen para captar el interés del público), darle toda la visibilidad posible en los medios propios, ganados y pagados. Con esto quiero decir que debe estar presente desde en la home de nuestro eCommerce o el blog hasta en nuestras redes sociales y campañas de PPC. El mundo tiene que saber que tenemos un nuevo producto y que lo necesita.
Fase de crecimiento
Ahora que hemos puesto en el mercado nuestro nuevo lanzamiento, entramos en una fase en la que empieza a crecer. Dependiendo del esfuerzo que hayamos hecho durante la introducción y lo precisos que fueran nuestros estudios y segmentación previos, el crecimiento se verá determinado.
Lo más positivo es que por fin tenemos datos reales de consumo y sabemos cómo están respondiendo los distintos canales en cuanto a captación y conversión. Este histórico, aunque corto, nos ayudará a tomar las primeras decisiones (niveles de stock, inversión publicitaria, segmentación del público). El precio debe seguir siendo competitivo porque aún está en pleno proceso de implantación.
Fase de madurez
Tu producto está completamente integrado en el mercado, los clientes lo conocen y lo valoran. Ya no es una novedad, pero es respetado por sus características y atributos diferenciales.
Como el mercado está vivo siempre es altamente probable que en este periodo de madurez se crucen distintos productos de otros competidores que han detectado la posibilidad de negocio y han lanzado sus propias versiones. Dependiendo de cómo te hayas posicionado tendrás la oportunidad de subir el precio pero, si quieres que esto no suponga un problema, tendrás que ofrecer algo más. Es un buen momento para añadir nuevas características, complementos o servicios asociados que operen como barreras de acceso para tus rivales.
Fase de declive
No es que la necesidad que cubrimos desaparezca pero, ya sea por una cuestión de vigencia, de hábitos de consumo del público o la irrupción de un nuevo competidor, lo cierto es que la inmensa mayoría de los productos entran en una fase de caída de su popularidad y ventas.
Cuando detectes que esto sucede es el momento de tomar decisiones: ¿mantenemos el producto en el mercado? ¿podemos hacer que sea más competitivo a nivel de precio reduciendo el coste de producción? ¿hasta aquí hemos llegado y tratamos de liquidar stock y descatalogamos?
En el eCommerce hay un asunto muy relevante durante esta fase. Cuando sacamos un producto de nuestro catálogo tenemos que tener en cuenta ciertos condicionantes a nivel de la tienda online. No se puede (mejor dicho: no se debe) eliminar un producto de un plumazo, por una cuestión de experiencia de usuario y también de SEO.
Las fichas de esos productos permanecen enlazadas desde artículos del blog, reviews que pueden habernos hecho en distintos blogs o medios… esto supone que potencialmente existen enlaces que benefician a nuestro dominio y que se perderán. Debes hacer este estudio antes de nada.
Además Google tendrá indexada esa ficha con lo que aparecerá en determinadas búsquedas. Los usuarios harán click sobre el enlace y accederán a una página que no devuelve información y eso siempre empobrece muchísimo la experiencia.
Cruzando estos dos datos deberás decidir qué haces con esas URLs: puedes dejarlas y modificar el contenido ofreciendo productos alternativos o bien redirigirlas. Si optas por esta última opción asegúrate siempre de hacerlo a la página más relevante para el usuario: la nueva versión del producto si existiera, si no la categoría del mismo y, por último, la home del eCommerce de no existir una alternativa más precisa. El consejo es que trates de mantener la especificidad lo más posible.
¿Te has parado a pensar antes en todo esto? Seguro que si no lo has hecho te estás dando cuenta de lo interesante que puede llegar a ser estratégicamente gestionar el ciclo de vida del producto en el eCommerce.
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